9 de noviembre de 2010

80 AÑOS SIRVIENDO EN LA INFORMACIÓN DIARIA

La pasión de servir en la información, nos enaltece y es un orgullo realizar esta noble tarea; no importa dónde estemos y cómo estemos, siempre estaremos listos para cubrir la nota, y como soldados de la información por cada uno que caiga siempre habrá muchos más que se levantarán para enterar a usted del acontecer diario.

Juan Carlos Absalón, San Andrés Tuxtla, Ver.—Y llegamos al 80 Aniversario de nuestro muy querido Diario Eyipantla Milenio; ¡así es, estimados lectores…! ¡Estamos de plácemes! ¡Estamos de fiesta!
Agradecemos su preferencia para con nuestro medio impreso; ahora también, en nuestro portal de Internet www.diarioeyipantla.com donde tenemos un registro de 2 millones, 700 mil, 692 de personas que han leído nuestra información, lo que nos mantiene en el gusto del lector y nos da la confianza y el impulso para cada día ser mejores.
Un recuerdo muy especial a la memoria de don Roberto Francisco Enríquez Valencia, quien hace cuatro años se nos adelantó, y de quien aprendimos mucho y que tuvimos la oportunidad de tratar en la tercera época de este prestigiado medio de comunicación, ahora diario Eyipantla Milenio.
Para quienes nos preguntan ¿qué quiere decir o que significa? Eyipantla, antes, recordamos cuando Don Roberto (Q.E.P.D.) decía que el diario manejaba las tres vertientes del sistema de gobierno que prevalece en nuestro México, lindo y querido; donde por el momento contamos con un país con una República Democrática, Representativa y Federal; sin embargo es sabido de todos, que tenemos resistencia o una izquierda; tenemos aceptación o una derecha, según se encuentre en el poder, y de conveniencia o de quienes se van a la cargada para mantenerse en el sistema.
Así eyipantla, que proviene del náhuatl eyi, que significa tres; y pantli, que significa bandera o barranco. La caída de tres chorros, la vertiente de las tres caídas; de ahí la semejanza del diario Eyipantla Milenio; y bueno, lo de milenio es un agregado cuando se avecinaba la llegada del nuevo milenio.
Escuela empírica del periodismo en la Región, de reconocidas plumas que ahora figuran en diferentes medios y de los cuales algunos destacan por sus propios méritos, Eyipantla Milenio, ha recibido el reconocimiento público, en comentarios y en forma directa de quienes aquí se formaron como tal y que agradecidos por la oportunidad de tener esta plataforma ahora son reconocidos periodistas.
Ellos lo saben, algunos aún presentes, otros ya idos, tuvieron la oportunidad en su momento de destacar con sus artículos y columnas donde versaron diversos temas, algunos muy directos que incomodaron a más de uno, sin embargo la verdad salía a flote con el paso de los años; enlistarlos sería faltar a la memoria de algunos por ello, reiteramos ellos lo saben y por ello nuestro reconocimiento y que por la misma razón son parte de esta celebración, 80 años de servicios informativos en la Región de Los Tuxtlas, y ahora con el Internet, allende sus fronteras.
Importancia destacada, para quienes han estado atrás de un escritorio o una mesa de trabajo en la redacción corrigiendo las notas; dando la importancia requerida a cada palabra en la formación y el diseño de las notas, artículos, columnas, editoriales, y demás…
Han sido muchas noches, ha sido prácticamente la vida misma, en la que nos adentramos a una edición más, tarea diaria donde ingresamos con la tarde, y en la gran mayoría hemos visto el alba del siguiente día dejando siempre a nuestras familias para cumplir con la noble tarea de presentar una nueva edición para nuestros lectores; trabajo que compartimos con nuestros compañeros prensistas que arriban a las frías máquinas a imprimir estos trabajos que a muy temprana hora el repartidor llevará a cada uno de sus hogares, negocios y oficinas…
Es un trabajo digno, es un trabajo como todos, sólo que hay que hacerlo con muchas ganas, mucho amor y sobretodo, valorarlo como el que más, porque es un trabajo que nos enaltece, nos da el respeto y el aprecio de la sociedad en general.
Para quienes aprendemos a querer este noble oficio, que ahora prácticamente se ha convertido en un oficio muy peligroso porque la inseguridad ya nos alcanzó, lo seguiremos haciendo como el primer día, y aunque en ello nos vaya la vida propia, así continuaremos porque ya somos parte de la historia.
Somos parte de esta tercera época, que ahora adentra a su nuevo director, el joven galeno Roberto Francisco Enríquez Hernández, quien ha aprendido el oficio que le heredara su padre, Don Roberto Francisco Enríquez Valencia, y que habrá mucho de aprender del periodismo en el futuro inmediato, donde la noticia fluye en cuestión de segundos por la modernidad en la tecnología, y que con ello incursionará en la cuarta época, con un periodismo más riesgoso, de mayor apertura, y generacional, con el engranaje que requerirán los nuevos tiempos.
 Hemos tenido la oportunidad de estar en este medio impreso, más de diez años, y hemos sido testigos de la verdad tras el periodismo, porque el periodismo no paga, sólo nos deja grandes satisfacciones, la amistad de quienes entienden nuestro trabajo y el rechazo de quienes se sienten ofendidos cuando se les señalan sus errores; además en el terreno familiar, el tiempo irreparable para con nuestros seres queridos a los que hemos abandonado por cumplir con esta apasionante tarea, que es la de informar, no importando donde estemos, como estemos, siempre estaremos ahí, sirviendo a usted, a través de nuestras notas diarias, somos los soldados de la información y en el deber han caído muchos y seguirán cayendo, pero la verdad de la noticia nadie podrá callarla, por cada uno que caiga otros se levantarán, pero la información siempre estará ahí, en su hogar, en su mesa, en su escritorio, en su negocio, en el café, donde quiera que usted vaya, ahí estará…
¡Por ello, y con orgullo con la copa en la mano brindemos, diciendo salud! ¡Felicidades Diario Eyipantla Milenio!

....Mario Vargas Llosa define al periodismo como “El mayor garante de la libertad, la mejor herramienta de la que una sociedad dispone para saber qué es lo que funciona mal, la forma para promover la causa de la justicia y para mejorar la democracia”

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