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“Crudo
invierno, cruda economía”
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Manuel
Rosendo, visionario
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De
FIOSCER a SEDESOL…
Decía el escritor argentino Jorge Francisco Isidoro Luis
Borges, en uno de sus pensamientos que quedaron para la posteridad: “Quizá haya
enemigos de mis opiniones, pero yo mismo, si espero un rato, puedo ser también
enemigo de mis opiniones.”
La reflexión en el silencio es una gran enseñanza que nos
ayuda a corregir nuestros propios errores y encontrar la verdadera amistad que
nos han brindado gente hermosa y que Dios bendice por sus buenas acciones.
Aunado a lo que
pronostican investigadores de las ciencias atmosféricas en torno a que se
avecina un crudo invierno, lo mismo se avecina en el seno de miles de familias
que quizá no logran equilibrar el gasto de la canasta básica.
Y es que ahora ya no es
por falta de previsión, sino porque el bajo salario que perciben y la falta de
prestaciones de patrones que no cumplen con las debidas obligaciones fiscales
están estrangulando a trabajadores con sueldos miserables donde la institución
que debiera defenderlos se ha convertido en cómplice de corruptelas.
Imagínense, si esta
situación la viven empleados al servicio de empresas particulares, el caso ya
no será ajeno para quienes trabajan en la función pública, ya que aunque hay
alcaldes que dicen que los sueldos de su gente de confianza y sindicalizados
están asegurados, lo cierto es que algunos están buscando afanosamente
conseguir préstamos para pagar los aguinaldos en el próximo mes.
Por lo pronto, ya están
pensando ¿cómo le van a hacer? Pues el Congreso del Estado, ya lo dijo en voz
de un legislador, “…el Congreso no autorizará créditos para pagar aguinaldos.”
Y mientras el Congreso
del Estado decide sobre el crédito de los 300 mpd, solicitado por el alcalde
Manuel Rosendo Pelayo, para la Ampliación del Boulevard 5 de Febrero a 4 carriles,
la construcción del primer centro deportivo de alto rendimiento y la
modernización del sistema de alumbrado público, el Munícipe supervisó este
martes 18 de noviembre, el inicio de los trabajos del centro deportivo en
terrenos adjuntos a la colonia de Los Maestros.
La política de Manuel
Rosendo resulta diferente por la visión con que la está actuando, pensar en
grande, para hacer grande y trascendente a San Andrés Tuxtla; que San Andrés
Tuxtla cobre importancia no sólo a nivel nacional sino internacional.
Visionemos el Boulevard
5 de Febrero, con un tráfico diario de 115 mil vehículos que vienen den centro
del país y del sur del Estado, y los propios del municipio de San Andrés Tuxtla;
a cuatro carriles, el cual se realizará en 5 etapas.
Los cuatro carriles con
banquetas y camellones suman 16.8 metros de ancho con una longitud de 6.4
kilómetros, obra que tendría una inversión de 220 mdp; de la cual el 50% la
deuda la estaría pagando administración actual y el resto a pagar en los 11
años subsecuentes.
Imaginemos que ahorita
están los Juegos Centroamericanos y del Caribe 2014, que este año recae la
responsabilidad en el gobierno de Javier Duarte de Ochoa; si el proyecto del
Centro Deportivo de Alto Rendimiento, estuviera construido…
San Andrés Tuxtla,
también fuera sede de estos encuentros de talla internacional.
Imaginemos la derrama
económica, la visita de extranjeros y la oportunidad de mejores ingresos para
prestadores de servicios.
O en el caso de la
modernización del sistema de alumbrado público que presenta un alto costo de
mantenimiento por el reemplazo de luminarias y reemplazo de balastros;
luminarias obsoletas; alto costo de energía eléctrica, lo que en suma es una
infraestructura deficiente por contar con un cableado en malas condiciones a lo
que le sumamos el robo de cableado por ladrones de cobre.
Los datos de
investigación precisan que son 5,615 lámparas que consumen 235,432
kilowatts hora por mes, lo cual tiene un
costo de casi 717 mil pesos; con el mismo número de lámparas renovadas (luz
blanca) el consumo bajaría a 134,807 kilowatts hora por mes lo cual tendría un
costo de 410,468 mil pesos. Esto sería un ahorro para el municipio de más del
42%, es decir, más de 306 mil pesos mensuales.
San Andrés Tuxtla,
necesita inversión, y la inversión es generosa; genera fuentes de empleo, que
tanta falta hacen para evitar que nuestros conciudadanos sigan migrando al
norte de la República Mexicana u otros países.
El “patrón de conducta”
de los programas emanados de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL),
cambian de nombre pero no de forma.
En el año 1980, el Fideicomiso
para Obras Sociales a Campesinos Cañeros de Escasos Recursos (FIOSCER), fue
sepultado durante la privatización ejercida desde el periodo de Miguel de la
Madrid Hurtado y agresivamente abordado por Salinas de Gortari al privatizar totalmente
la industria azucarera.
En el antecedente hay
que citar que el bisabuelo de la Sedesol, creado en el año 1959, fue la
Secretaría de Obras Públicas; de allí en 1976 surge la Secretaría de
Asentamientos Humanos y Obras Públicas, y en 1982, nace la Secretaría de
Desarrollo Urbano y Ecología.
Y tenemos Sedesol desde
el año 1992.
En San Andrés Tuxtla,
también tuvimos FIOSCER, era el Regional XI, a cargo del ingeniero Manuel
Ramírez Peñaflor, poblano que fue apreciado en el Distrito de Los Tuxtlas y que
tenía la relación con los líderes cañeros que abastecían los ingenios
Cuatotolapan de Hueyapan de Ocampo, y los de San Pedro y San Francisco El
Naranjal.
El FIOSCER, contaba con
dos departamentos; Obras y Asistencia Social.
Con el primero construía
escuelas de nivel preescolar, primaria, canchas escolares o de usos múltiples y
bardas perimetrales, así como salones ejidales, y viviendas para campesinos
cañeros de escasos recursos.
Había teatro guiñol con
el que educaban a la gente del campo, mensajes que transmitían para mejorar la
conducta social en los hogares, alejar del alcohol a los campesinos cañeros y
de malos hábitos a los jóvenes.
Había becas para
educadoras que asistían en los jardines de niños de las zonas cañeras de Ángel
R. Cabada, Lerdo de Tejada y Hueyapan de Ocampo.
FIOSCER era “el sedesol”
en los municipios de tal forma que la problemática social de estas regiones se
reflejaba como espejo, se conocía mucho de las necesidades de la zona rural más
que las propias instituciones hoy en día.
Los encuentros estatales
reflejaban las necesidades y que hacer político social en la gente del campo,
no era solo un programa de entretenimiento, era de ir más allá para resolver
situaciones latentes que no degeneraran en hechos delictivos o violentos.
El trabajo social, de
las promotoras era capacitar y preparar a las mujeres de los campesinos para
aprender un oficio que les ayudara a generar ingresos que fortaleciera la
economía en sus hogares.
Por eso cito el
antecedente.
Y es que hasta las
hortalizas o huertos familiares se aplicaban en aquel entonces.
Paul D'House Rolland, ingeniero
egresado de la Université Catholique de Louvain (Bélgica), era un francés con
especialidad en ciencias agronómicas contratado por el gobierno federal para
trabajar en los proyectos de hortalizas familiares dentro del fideicomiso.
Paul tuvo que enseñar
algunas palabras en francés a sus compañeros de trabajo en el FIOSCER Región IX
ubicado en San Andrés Tuxtla, para lograr la comunicación, al mismo tiempo
obligado a entender el español para así instruir a los campesinos en el sistema
de la siembra en espacios pequeños.
Poco a poco el ingeniero
en ciencias agronómicas enseñó la técnica de cultivos de hortalizas en espacios
pequeños, lo que en mucho ayudó en la economía de los hogares de aquellos años,
allá por el 1978.
El sistema en cualquiera
de sus renglones, federal, estatal o municipal ha buscado enseñar con las
herramientas apropiadas el cultivo de vegetales, plantas y frutas del consumo
humano, y desde entonces y mucho antes las formas no cambian, solo el nombre es
nuevo.